domingo, 12 de octubre de 2008

use protector solar



homilia del domingo 12 de octubre


Historia del Santo Rosario
En la antigüedad, los romanos y los griegos solían coronar con rosas a las estatuas que representaban a sus dioses como símbolo del ofrecimiento de sus corazones. La palabra "rosario" significa "corona de rosas".
Siguiendo esta tradición, las mujeres cristianas que eran llevadas al martirio por los romanos, marchaban por el Coliseo vestidas con sus ropas más vistosas y con sus cabezas adornadas de coronas de rosas, como símbolo de alegría y de la entrega de sus corazones al ir al encuentro de Dios. Por la noche, los cristianos recogían sus coronas y por cada rosa, recitaban una oración o un salmo por el eterno descanso del alma de las mártires.
La Iglesia recomendó rezar el rosario, el cual consistía en recitar los 150 salmos de David, pues era considerada una oración sumamente agradable a Dios y fuente de innumerables gracias para aquellos que la rezaran. Sin embargo, esta recomendación sólo la seguían las personas cultas y letradas, pero no la mayoría de los cristianos. Por esto, la Iglesia sugirió que aquellos que no supieran leer, suplantaran los 150 salmos por 150 Avemarías, divididas en quince decenas. A este "rosario corto" se le llamó "el salterio de la Virgen".
A finales del siglo XII, Santo Domingo de Guzmán sufría al ver que la gravedad de los pecados de la gente estaba impidiendo la conversión de los albigenses y decidió ir al bosque a rezar. Estuvo en oración tres días y tres noches haciendo penitencia y flagelándose hasta perder el sentido. En este momento, se le apareció la Virgen con tres ángeles y le dijo que la mejor arma para convertir a las almas duras no era la flagelación, sino el rezo de su salterio.
Santo Domingo se dirigió en ese mismo momento a la catedral de Toulouse, sonaron las campanas y la gente se reunió para escucharlo. Cuando iba a empezar a hablar, se soltó una tormenta con rayos y viento muy fuerte que hizo que la gente se asustara. Todos los presentes pudieron ver que la imagen de la Virgen que estaba en la catedral, alzaba tres veces los brazos hacia el Cielo. Santo Domingo empezó a rezar el salterio de la Virgen y la tormenta se terminó.
En otra ocasión, Santo Domingo tenía que dar un sermón en la Iglesia de Notre Dame en París con motivo de la fiesta de San Juan y, antes de hacerlo, rezó el Rosario. La Virgen se le apareció y le dijo que su sermón estaba bien, pero que mejor lo cambiara y le entregó un libro con imágenes, en el cual le explicaba lo mucho que gustaba a Dios el rosario de Avemarías porque le recordaba ciento cincuenta veces el momento en que la humanidad, representada por María, había aceptado a su Hijo como Salvador.
Santo Domingo cambió su homilía y habló de la devoción del Rosario y la gente comenzó a rezarlo con devoción, a vivir cristianamente y a dejar atrás sus malos hábitos. Santo Domingo murió en 1221, después de una vida en la que se dedicó a predicar y hacer popular la devoción del Rosario entre las gentes de todas las clases sociales para el sufragio de las almas del Purgatorio, para el triunfo sobre el mal y prosperidad de la Santa Madre de la Iglesia.
El rezo del Rosario mantuvo su fervor por cien años después de la muerte de Santo Domingo y empezó a ser olvidado. En 1349, hubo en Europa una terrible epidemia de peste a la que se le llamó ¨la muerte negra" en la que murieron muchísimas personas.
Fue entonces cuando el fraile Alan de la Roche, superior de los dominicos en la misma provincia de Francia donde había comenzado la devoción al Rosario, tuvo una aparición, en la cual Jesús, la Virgen y Santo Domingo le pidieron que reviviera la antigua costumbre del rezo del Santo Rosario. El Padre Alan comenzó esta labor de propagación junto con todos los frailes dominicos en 1460. Ellos le dieron la forma que tiene actualmente, con la aprobación eclesiástica. A partir de entonces, esta devoción se extendió en toda la Iglesia.
¿Cuándo se instituyó formalmente esta fiesta?El 7 de octubre de 1571 se llevó a cabo la batalla naval de Lepanto, en la cual los cristianos vencieron a los turcos. Los cristianos sabían que si perdían esta batalla, su religión podía peligrar y por esta razón confiaron en la ayuda de Dios a través de la intercesión de la Santísima Virgen. El Papa San Pío V pidió a los cristianos rezar el Rosario por la flota. En Roma estaba el Papa despachando asuntos cuando de repente se levantó y anunció que la flota cristiana había sido victoriosa. Ordena el toque de campanas y una procesión. Días más tarde llegaron los mensajeros con la noticia oficial del triunfo cristiano.
Posteriormente, instituyó la fiesta de Nuestra Señora de las Victorias el 7 de octubre. Un año más tarde, Gregorio XIII cambió el nombre de la fiesta por el de Nuestra Señora del Rosario y determinó que se celebrase el primer domingo de Octubre (día en que se había ganado la batalla). Actualmente se celebra la fiesta del Rosario el 7 de Octubre y algunos dominicos siguen celebrándola el primer domingo del mes.

martes, 9 de septiembre de 2008

SEMINARIO DE VIDA EN EL ESPÍRITU


El amor de Dios es Incondicional

Septiembre 8 al 12 de 2008
Hora: 7:00 – 9:00 p.m.
Templo Parroquial
Nuestra Señora de la Paz


“Reciban el Espíritu Santo…
Vayan y anuncien la Buena Nueva a todos los pueblos…”

SEMANA POR LA PAZ


¿Y Tu, qué estás aportando para construir la paz de Colombia?
Esta es una semana para la reflexión y la oración.
Construyamos la paz de Cristo por los caminos de Colombia
“Hacia la Paz: Verdad, Vida digna, Desarrollo y Libertad” es el lema de la Semana por la Paz 2008,
La Red Nacional de Iniciativas Ciudadanas por la Paz y contra la Guerra y la Conferencia Episcopal de Colombia han preparado un evento, en el cual se darán a conocer los aportes al país de Semana por la Paz, durante estos 20 años de historia.El evento contará con la presencia del Alcalde del Distrito Capital, Samuel Moreno Rojas; embajadores, representantes de la Comisión Nacional de Reparación y Reconciliación y de organizaciones gubernamentales y no gubernamentales del orden nacional e internacional.La apertura de Semana estará a cargo de monseñor Héctor Fabio Henao y de Luis Emil Sanabria Durán, Presidente Colegiado de Redepaz.El director del Cinep, Mauricio García y Ana Teresa Bernal, Presidenta Colegiada de Redepaz e integrante de la CNRR, hablarán sobre el tema: Semana por la Paz, 20 años de historia.Se contará con la presencia del mensajero de la paz de Naciones Unidas, César López, quien interpretará varios temas musicales. Igualmente se contará con el testimonio de varias víctimas de la violencia, quienes esbozarán sus expectativas sobre los temas de Verdad, Vida digna, Desarrollo y Libertad.Es importante recordar que la Semana por la Paz es un escenario que busca hacer visible los esfuerzos de miles de personas que trabajan por el logro de la paz y por la construcción de iniciativas para dignificar la vida.Esta iniciativa se empieza a celebrar en los años 80s, cuando se dan en Colombia una serie de jornadas en rechazo a la muerte y en defensa de la vida.En 1986 se origina el Movimiento por la Vida, que se consolida por medio de la Compañía de Jesús, cuando los sacerdotes jesuitas, encabezados por los sacerdotes Francisco De Roux y Horacio Arango, desarrollan una reflexión sobre la situación de violencia en el país y concluyen que es necesario apoyar iniciativas de la sociedad, encaminadas a la búsqueda de la paz.Después de reunir recursos, vendiendo al Banco de la República, “La Custodia”, joya de incalculable valor de la época de la Colonia y de propiedad de la Compañía de Jesús, y de otros ofrecidos por cooperación internacional, dan inicio al Programa por la Paz y, a finales del mes de septiembre de 1988 se realiza la Primera Semana por la Paz.Posteriormente, se dieron en el país una serie de hechos que mostraron el anhelo de paz. Las expectativas de democratización desembocaron en la Constitución de 1991.En 1992, cuando era Presidente de Colombia, César Gaviria Trujillo, decretó la guerra integral y, como respuesta y alternativa para buscar caminos de participación ciudadana en la construcción de la paz surge en Bogotá, la Iniciativa Ciudadana por la Paz.Desde ese momento, se convocó a las diferentes expresiones ciudadanas de las regiones del país y a los sectores sociales a un encuentro de articulación y propuestas (19 al 21 de noviembre de 1993), naciendo allí la Red Nacional de Iniciativas Ciudadanas contra la Guerra y por la Paz -REDEPAZ. Es en este encuentro cuando el Programa por la Paz entrega a la Red, la Semana por la Paz y, es desde 1994, cuando REDEPAZ realiza, ininterrumpidamente esta jornada, en la cual participan, de manera activa, diferentes sectores sociales, organizacionales no gubernamentales y gubernamentales, de derechos humanos y demás instituciones.

miércoles, 3 de septiembre de 2008

San Gregorio Magno - Septiembre 3


Gregorio significa "el Vigilante", en GriegoNació y murió en Roma en 540 y 604.

Estudió Derecho y en 573 fue nombrado Prefecto.Como heredó la fortuna de su padre, construyó varios monasterios en Roma y se retiró al Monte Celio. Fue ordenado diácono y en 578 el Papa Benedicto I lo ordenó presbítero.

Fungió como Nuncio en Constantinopla entre 579 y 586. Tres años después fue elegido Papa, misión en que se distinguió por su oratoria, política tolerante, administración atinada, interés misionero en Inglaterra y España y tacto en la reforma del clero y la liturgia.

Su acción pastoral se refleja en varias de sus obras: Regla pastoral, Diálogos, Sacramentario y Antifonario.Se distinguió, también, por su obra bíblica (varios comentarios), ascética (su Moralina) y epistolar (859 cartas). Apenas muerto, fue venerado como santo y la tradición lo asumió como Patrón de los liturgistas, sabios e investigadores, por su amplia erudición; de los músicos, chantres y cantores, por la escuela de canto que fundó (cantos gregorianos); Defensor contra la enfermedad de la gota y la peste; y Abogado de las almas del purgatorio por las "misas gregorianas" que hasta él se hicieron remontar.En la iconografía aparece, como todos los papas, con la tiara y la cruz papal; en calidad de Padre de la Iglesia (uno de los cuatro grandes de Occidente) al que la tradición conoce como El Grande; y como monje.

Una paloma, símbolo de inspiración, una cartela con notas musicales, los emblemas pontificios y el ánima sola o varias almas del purgatorio son sus atributos principales.

Beato Bartolomé Gutiérrez - Septiembre 2

Nació en México en 1580 y murió quemado en Omura, Japón, en 1632. Ingresó a la Orden agustina.
Con Fray Pedro Solís, viajó en 1605 a Manila y misionó en Japón entre 1618 y 1620. Escribió una narración sobre los mártires de Japón en 1622.
Aunque fue expulsado, regresó a Japón en 1628, hasta que el rey Takanaga mandó apresarlo y quemarlo el 30 de septiembre de 1632 junto con otros misioneros.
Fue beatificado por el Papa Pío IX el 22 de mayo de 1867.

San Gil o Egidio -Septiembre 1

("El Protegido o Defendido" en latín; o "cabrito" en griego).
Ermitaño de origen griego que vivió entre los siglos VI y VII. Algunas leyendas piadosas lo consideraban un rico heredero emigrado de Marsella y establecido como anacoreta en un bosque, en la desembocadura del río Ródano. Con el tiempo edificó un monasterio.
Se le atribuyen algunos milagros y la piedad en el Medioevo lo llamó: Abogado de los pecadores, por haber ayudado en su conversión al Rey Carlos; Protector de pobres, tullidos, arqueros, por haber sido herido por una flecha; Abogado contra el miedo y el incubo, por ayudar a una cierva en peligro; y Defensor contra las enfermedades del cáncer y la epilepsia, llamada "mal de San Gil".
Se le consideró uno de los "14 santos auxiliares". Se le representa como anacoreta, con varios atributos: cierva, lirio, flecha clavada en el brazo, dos puertas (regalo del Papa a su monasterio) y un mensaje celeste en una filacteria por haber descubierto un pecado oculto del Rey Carlos y hacérselo confesar.

VALOR SEPTIEMBRE: Reparación. LEMA: Justicia y reparación, la fuerza del corazón.




Hermanos y hermanas reciban mi saludo paternal de paz y bien en el Señor Jesús.



En la vivencia comunitaria de los valores que nos llevan a la justicia, durante el mes anterior reflexionamos el valor de la Denuncia, la realización de un hecho contrario a las normas, al bien común y que afecta la armonía y la con-cordia de la comunidad (carta de Agosto 2008); ahora avanzamos, pues no basta con simplemente señalar, es nece-sario que todo vuelva al orden original, es necesario que exista la Reparación, que debemos situarla, ante todo, dentro del marco de la Reconciliación que hace de las víctimas y de los opresores una nueva creación.

La reconciliación es mucho más que la reparación de daños y el arrepentimiento de los males cometidos. Todo ello está incluido, pero la idea de reconciliación que propone la Sagrada Escritura supone que este acontecimiento nos introduce en un nuevo estado y nos transforma en nuevas criaturas. La reconciliación no se reduce a una nueva restauración del orden legal o moral, nos lleva a un lugar donde nunca antes habíamos estado: es un don que brota libremente de la gracia, cuyo fruto nos lleva necesariamente al perdón; es una nueva creación en lo más profundo de nuestro ser: darle cabida en nuestro corazón a los que nos han hecho mal, a nuestros enemigos.

En el contexto de la legislación de nuestro país la Reparación es muy mencionada y reclamada como la retribución que se da a las víctimas sobrevivientes de las situaciones de violencia. En Cristo la reparación no es un simple acto mecánico, de restaurar lo dañado, o sanar al enfermo, o devolver la alegría a quien se encuentra triste. Quien repara, movido por el Espíritu de Cristo, deja las cosas mejor aún, que como estaban al principio: “Y a quien le haya exigido algo injustamente, le devolveré cuatro veces más” (Lc 19.8), dijo Zaqueo lleno de arrepentimiento.

Frente a la realidad que nos correspondió vivir, esa misma a la que nos hemos acercado a través de las denuncias del mes anterior, requiere ser transformada. Reparar, al estilo de Cristo, consiste en que los esposos corrijan las fallas y se perdonen y reconcilien mutuamente, vuelvan al amor primero; en que los hijos respeten y obedezcan a sus padres como lo hacían en sus primeros años; en que los hermanos se comprendan y se amen, y tengan un mismo sentir; en que los amigos sean desinteresados y siempre atentos a las necesidades del otro; en que dentro de la so-ciedad a la vida de las personas no se le tase por un valor comercial, sino que se le reconozca la dignidad de “imagen y semejanza de Dios”. Solo así, y no por otros caminos, la Reparación será auténtica y aportará, en la consecución de la justicia, dándole otro sentido; será un eslabón más frente a la estructura de pecado que nos carcome y destruye; será en fin, constructora de concordia y de paz.

“Justicia y reparación, la fuerza del corazón”, es nuestro lema de este mes: motivación para poner todo nuestro empeño cristiano por una reparación auténtica, testimoniada en relaciones fraternas que dignifican a la persona, la familia y la sociedad, fruto del perdón y de la reconciliación y expresión de la justicia auténticamente cristiana.

Con aprecio paternal les doy mi bendición.

+ VÍCTOR MANUEL LÓPEZ FORERO
Arzobispo de Bucaramanga

miércoles, 27 de agosto de 2008

martes, 26 de agosto de 2008

PALABRA Y VIDA: Agosto 31 de 2008

Evangelio según San Mateo 16,21-27

Desde entonces comenzó Jesús a manifestar a sus discípulos que él debía ir a Jerusalén y sufrir mucho de parte de los ancianos, los sumos sacerdotes y los escribas, y ser matado y resucitar al tercer día.
Tomándole aparte Pedro, se puso a reprenderle diciendo: «¡Lejos de ti, Señor! ¡De ningún modo te sucederá eso!»
Pero él, volviéndose, dijo a Pedro: «¡Quítate de mi vista, Satanás! ¡Escándalo eres para mí, porque tus pensamientos no son los de Dios, sino los de los hombres!
Entonces dijo Jesús a sus discípulos: «Si alguno quiere venir en pos de mí, niéguese a sí mismo, tome su cruz y sígame. Porque quien quiera salvar su vida, la perderá, pero quien pierda su vida por mí, la encontrará.
Pues ¿de qué le servirá al hombre ganar el mundo entero, si arruina su vida? O ¿qué puede dar el hombre a cambio de su vida?
«Porque el Hijo del hombre ha de venir en la gloria de su Padre, con sus ángeles, y entonces pagará a cada uno según su conducta.